domingo, enero 10, 2016

Run


MILTON ERICKSON AND MAICKEL MELAMED


Si Milton Erickson hubiera conocido a Mickel Melamed se hubieran hecho amigos

Por Félix Gómez, M.D



Durante  el 35th anniversary International Congress  On Ericksonian Aproaches to Psychotherapy realizado en Phoenix Arizona por la Fundación Milton H Erickson, el brillante psicólogo Ernest Rossi alumno y colaborador  de Milton Erickson por más de tres décadas, centro su ponencia  en   como la curiosidad fue un aspecto vital en  la vida personal  y profesional de Erickson. Este aspecto está  profundamente  documentado  en libros ya clásicos como Terapia no convencional de Jay Haley, Raíces profundas de William Hudson O ‘Hannlon  (Bill O ’Hannlon) o en  Mi voz ira contigo de Sídney Roosen, este  último  cuenta  una  anécdota  de Erickson  muy conocida: Cuando este tenía  18 años y  sufrió su primer ataque de poliomielitis, imposibilitado de moverse, la familia que eran granjeros  y debían trabajar todo el día  , por lo que lo dejaban  amarrado a  una silla con  un hueco para que hiciera sus necesidades, durante esos duros meses ,  “ Tenía una hermanita que ya había aprendido a gatear; por mi parte, yo debía aprender a pararme y a caminar. Se imaginan con qué interés observé a mi hermanita mientras pasaba del gateo al aprendizaje de cómo pararse. Ninguno de ustedes sabe cómo aprendió a pararse. Ni siquiera saben cómo aprendieron a caminar. Tal vez piensen que son capaces de caminar en línea recta seis cuadras seguidas si no hay tránsito de peatones ni de vehículos. ¡No saben que no podían caminar en línea recta manteniendo un ritmo uniforme!”. De esta forma observando con curiosidad la manera como su hermana caminaba Erickson comenzó a entrenar sus músculos, primero los dedos de la mano, luego  las manos y progresivamente el resto del cuerpo, esta experiencia le permitió a Erickson desarrollar a lo largo de su vida un forma de trabajo que cambio la forma de hacer terapia.

En el libro Hope & Resiliency: Understanding the Psychotherapeutic Strategies of Milton H, escrito por    Dan Short   y     Betty Alice Erickson,  cuya edición en español fue traducida como   La hipnosis de Milton Erickson describe  cómo la curiosidad llevo a Erickson a un viaje  más allá de las limitaciones   creando posibilidades  y recursos en sus pacientes, en su  propia familia y en el mismo. Por ejemplo, en Milton Erickson Un sanador Americano escrito por   Betty Alice Erickson  y  Bradford Keeney,  describe el trabajo de Erickson  como la de un chamán. las tradiciones en todo el mundo, los chamanes inician su viaje cuando una enfermedad aparece en sus vidas. Desdé esa perspectiva  todas los desafíos que enfrento Milton Erickson y la manera como desarrollo soluciones a lo largo de su vida ha llenado cientos de libros acerca de las historias terapéuticas de Erickson.

Hace  12 años  descubrí la historia de un joven   venezolano  llamado  Maickel Melamed que se ha enfrentado a su  distrofia muscular de una manera que me recuerda la forma como Erickson enfrentaba la vida .Este joven Venezolano  es  una persona que ha centrado su trabajo al igual que Milton Erickson no en sus “limitaciones”  su visión y misión de vida   están  centrada  en sus capacidades y posibilidades. Mickel ha inspirado, motivado y despertado el espíritu de cientos de miles de venezolanos a conectarse con su  sentido de vida, desde la humildad  pero también desde la trascendencia, escuchándole, en videos en You Tube   o   leyendo sus maravillosos libros; Si lo sueñas has que pase  o el último llamado Ruta  para un Sueño   me he sentido inspirado y conectado con un campo muy profundo de la conciencia. La pasión y el trabajo con que Melamed se enfrenta y se encuentra con la vida son la   hermosa muestras de un hombre que  enfrenta maratones y  abre caminos  de vida  con  un espíritu que está abierto y conectado  con las posibilidades y los recursos  al igual que Milton Erickson despertó y  ayudo a encontrar  muchos regalos en las heridas de las personas que fue encontrando en su camino por este mundo. Después de haber pasado casi tres décadas estudiando  las técnicas terapéuticas de a Milton Erickson  y de haberme formado con muchos alumnos cercanos de Erickson, puedo decir con una sonrisa  dentro mí mismo  que  si Milton Erickson hubiera conocido a Maickel Melamed  es muy seguro que se hubieran hecho amigos o al menos lo hubieran pasado en grande .

Que este inicio  2016  sea, un tiempo para que ese espíritu de la  creatividad y la curiosidad nos guíen a todos por estos mundos desafiantes de belleza y espanto .



Félix Gómez,

Verano 2016

Sydney, Australia