sábado, abril 11, 2009

Otoño En Miranda Sydney

El sonido hipnótico del viento en otoño me conmueve pongo más atención con mis oídos y ellos entran en contacto con la sonoridad del viento en su danza erótica con los árboles un lunes mientras espero en; la estación el tren a Sydney, durante 40 minutos he estado absorto en el paisaje donde el fondo naranja del cielo le hace contraste a los suburbios en forma de comarca que voy atravesando, una cacatúa blanca se ha detenido frente a un jardín de flores lavanda en la estación de Sutherland mientras el dueño de la casa sale a espantarla en medio de los gritos de la esposa , ante un sonoro “Get out “ las ondas ultrasonoras de sus gritos se conviertes en moléculas de aire que entran como forajidos del lejano oeste por mis tímpanos y de allí inicia su asalto hacia el martillo, el junke y el estribo los huesos mas pequeños del cuerpo disparando una cascada bioeléctrica que viaja por mi cerebro detonando memorias remotas divertidas e irónicas con mis amigos durantes muchos ascensos al pico oriental y Naiquatá en mi ciudad Caracas.mientras salgo de mi trance al darme cuenta que he llegado a central station en medio de un caravana de idiomas mientras me termino un café que llevo en mi termo.

Felix Gomez en un tren rumbo a la ciudad.

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